Un cine de verano en primavera

Cruzcampo convierte el viernes la calle Larios en una gran sala para más de 400 espectadores

 

 

En su paseo por calle Larios, seguramente usted haya tenido la oportunidad de comprar en sus tiendas, de disfrutar un helado en una de sus terrazas, de escuchar un concierto en vivo o incluso de ver una exposición al aire libre. Pero nunca habrá visto una película de cine. Sí, sentado cómodamente en una butaca, al igual que en una sala, y con una gran pantalla proyectando una película. Pues el viernes a la una de la tarde podrá hacerlo. La idea lleva la firma y el patrocinio de Cruzcampo, que celebra de este modo la inauguración, el sábado, del Festival de Málaga-Cine Español en el teatro Cervantes.

 

Séptimo arte en directo «y muchas sorpresas». Esto promete la iniciativa, en palabras de la responsable de Marketing de Cruzcampo, Ada Bernal, que insiste en su intención de que la campaña «saque el festival a la calle y, sobre todo, haga disfrutar a todos los malagueños». Estas buenas intenciones se traducen en que, por ejemplo, los asistentes a este gran cine al aire libre podrán llevarse luego a casa las butacas que han ocupado.

 

El cubo de palomitas es otro de los imprescindibles cuando se trata de disfrutar de una buena película. Pues también las habrá. En este caso, en otra de las acciones promocionales de la casa cervecera, que las repartirá gratuitamente por los bares del centro mientras dure el festival de la mano de un grupo de actores caracterizados de acomodadores. Algunos de los cubitos de maíz esconden además entradas para la terraza VIP que tiene Cruzcampo a la entrada del teatro Cervantes.

 

También en los autobuses

 

El cine también se mueve, y desde hace años los promotores del festival se ha fijado como objetivo promocionar el certamen por todos los rincones de la capital. En este punto, es fundamental la capacidad de los autobuses y marquesinas de la EMT como soportes publicitarios, por eso también se incorporan a la campaña promocional de la semana de cine. 

 

En concreto, ocho paradas de la zona centro -desde la Avenida de Andalucía hasta el Paseo del Parque- se revestirán con cortinas de terciopelo rojo y otros elementos que las asemejen a las entradas a las salas de proyección. Las pantallas promocionales en algunas de ellas, donde se proyectarán los trailers de las cintas que compiten en la sección oficial del certamen, completan la presencia extra de cine en las calles del centro histórico. Por lo pronto, la calle Larios ya ha extendido su alfombra roja. La cuenta atrás ha comenzado.